La salud sexual "es un estado de bienestar físico, emocional, mental y social relacionado con la sexualidad; no es solamente la ausencia de enfermedad, disfunción o incapacidad. Para que la salud sexual se logre y se mantenga, los derechos sexuales de todas las personas deben ser respetados, protegidos y ejercidos a plenitud", asegura el Organización Mundial de la Salud (OMS).
Lograr una salud sexual integral, por ejemplo de la mujer, es un reto al que nos hemos enfrentado a lo largo del tiempo y que actualmente sigue siendo un tema pendiente en materia de servicios médicos de calidad, atención oportuna y, sobre todo, información de calidad para la población.
En nuestro país, uno de cada seis embarazos se presenta en adolescentes, lo que representa 17%. Además, uno de cada cuatro de estos embarazos no fue planeado.
A nivel nacional, según cifras de la División de Información en Salud del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en 2011 se reportaron más de 72 mil 400 mujeres menores de 20 años embarazadas que acudieron por lo menos una vez a consulta prenatal.
Se estima que 26.1% de las mujeres del Distrito Federal en edad reproductiva, nunca ha utilizado un método anticonceptivo. Así, la prevención es una herramienta importante para mejorar esta situación. El uso de métodos anticonceptivos puede ayudar a elevar la calidad de vida de nuestras mujeres, disminuir el índice de embarazos no planificados y evitar prácticas sexuales de riesgo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario